¡Ha llegado el carnaval! Y con él, dulces y platos típicos para animar estas fechas. Y es que, además de las casetas, la música, las máscaras y los disfraces, los dulces y platos tradicionales ya están perfumando las cocinas de los hogares y las calles de muchas ciudades de España.

En Lleida, por ejemplo, encontramos embutidos como el farcit o la botifarra d’ou, una butifarra blanca que lleva huevo. En Cádiz, una de las ciudades por excelencia para celebrar los canavales, se celebra la ostionada o la erizada, que cuentan cada vez con más adeptos. Sin embargo, las costumbres de Carnaval más ancestrales las encontramos en el norte de España, especialmente en las zonas de Galicia y Asturias. Estas localidades destacan por su gran variedad de dulces estivales como: filloas, frixuelos, orejas, cañas y flores fritas, chulas, rosquillas… Tampoco nos podemos olvidar del famoso cocido gallego o lacón con grelos, pues hay quienes prefieren lo salado a lo dulce.

Llegados a este punto, ¡toca ponerse el delantal! Toma nota y prepara esta receta de frixuelos, freixós o filloas gallegas, propias del Carnaval.

 

Receta de frixuelos, freixós, filloas o sencillamente crepes con pan rallado (pues son muy similares)

Ingredientes

½ litro de leche

190 gr de harina

70 gr de pan rallado Frumen Natural

50 gr de mantequilla

4 huevos

1 cda de azúcar

1 cdita de sal

Un chorrito de coñac o Cointreau (1 o 2 cucharadas soperas aproximadamente)

 

Elaboración de los frixuelos

Comenzamos mezclando la harina, los huevos, la mantequilla, el pan rallado, la leche, el chorrito de coñac, el azúcar y la sal, hasta obtener una crema fina y homogénea (es importante que no se formen grumos). Tapamos el bol y dejamos reposar la mezcla al menos dos horas en la nevera.

Pasado el tiempo, echamos un poquito de mantequilla o unas gotitas de aceite de oliva en una sartén antiadherente y la ponemos al fuego. Con la ayuda de un cucharón, vertimos la masa expandiéndola por toda la sartén. La primera crepe o frixuelo normalmente se desecha y sirve para que toda la sartén esté perfectamente engrasada y no se peguen las siguintes.

Los frixuelos deben salir finos. Una vez hayamos vertido la amsa, dejamos que se cueza durante un par de minutos y le damos la vuelta para que se haga por el otro lado. Repetimos la operación hasta terminar con toda la masa, mientras vamos posando los frixuelos en un plato, uno encima de otro, para que se mantengan calientes.