Los buñuelos de bacalao son un plato típico de los países mediterráneos, entre los que destacan España, Italia, Francia y Portugal. La preparación de estos deliciosos bocados varía ligeramente según el país.

Se cree que los primeros buñuelos de bacalao se remontan al siglo XIII en Sevilla donde, debido a la escasez de alimentos, las tropas de Fernando III, en un asedio, se hicieron con un cargamento de bacalao y harina y comenzaron a preparar esta mezcla, que tras freírla sirvió de alimento durante un largo tiempo para la población.

Como en toda receta tradicional que se precie, existen muchas variedades. En Cataluña, el bacalao se mezcla con agua o leche, en Portugal con patata e incluso hay quienes incorporan un toque picante con guindilla.

Nosotros hemos seleccionado los siguientes ingredientes para nuestros buñuelos,

  • 150 g de bacalao salazón
  • 100 g de harina
  • 100 ml de leche
  • 1 huevo
  • 2 cucharadas de Pan Rallado Frumen Ajo y Perejil.
  • 1 cucharadita de levadura.
  • 2 cucharadas de aceite de oliva para la masa.

Para su preparación, es primordial tener el bacalao por lo menos un día antes en agua para desalarlo, cambiando el agua cada ocho horas. Así conseguiremos que el bacalao esté en un punto de sal ideal.

Cuando esté desalado le quitamos la piel y lo desmenuzamos, quitando también las espinas. Con este paso debemos tener especial cuidado ya que encontrarse una espina en el buñuelo es muy desagradable.

A continuación, en un bol, mezclamos la harina y la levadura enérgicamente y añadimos el huevo batido, la leche y las dos cucharadas de aceite de oliva. Es muy importante mezclarlo todo muy bien para que nos quede una masa lisa y sin grumos, similar a la de las croquetas.

Acto seguido, añadimos las dos cucharadas de Pan Rallado Frumen Ajo y Perejil y mezclamos nuevamente. En último lugar, introducimos el bacalao desmenuzado, removemos y… ¡La receta ya está casi lista!  Ahora sólo queda hacer bolas con la masa, freírlas en abundante aceite  y disfrutar.

Para acompañar nuestros buñuelos, podemos preparar una mahonesa, un alioli o una salsa de yogurt. Incluso, si eres de los que se atreven con un sabor más fuerte puedes darle un sutil toque de tabasco.